En
la actualidad el escultismo tradicional y el comercial al momento de pensar
los valores encuentran como punto de partida teorías que se fueron produciendo
en la denominada modernidad Europea. La conquista y dominación de los
territorios americanos se produce dentro de un proceso de colonización que
muestra a las claras la verdadera cara del moderno europeo que expulsó mediante distintos procesos sus “restos poblacionales” primeramente a las colonias,
con posterioridad a los países emergentes en los procesos independentistas
siempre sirviendo a dos dioses… el del catolicismo utilizado como velo del
verdadero dios Europeo, Wotan que retornaba de su sueño guerra tras guerra.
El
proceso de colonización dio como resultado el sostenimiento de las categorías
del pensamiento Anglo - Germánico en las clases altas y la Universidad
(reproductora de la Ideología del Amo), pero el intercambio cultural entre los
restos sociales: pueblos originarios, gauchos, mestizos, libertos y mas
tardíamente inmigrantes expulsados de la revolución industrial, provocaría el
nacimiento de un “pensamiento mestizo” que originará con los años un fenómeno
que los
Europeos no pueden entender desde sus categorías que son los diversos procesos
emancipatorios latinomaericanos.
Si
la cultura y el lenguaje determinan nuestra forma de ver y estar en el mundo
las dos modalidades de escultismo señaladas son variaciones de una misma
matriz: el discurso sobre el Ser y el Ego instaurado a partir de la modernidad[1]
donde el apoderamiento del mundo y del propio Yo, la explotación hasta el
agotamiento y la satisfacción individual son llevadas al extremo quebrando
la
relación existente entre la naturaleza, el conocimiento y el hombre, lo
que retorna en nuestra época con reclamos fragmentarios, en tanto no existe una
cosmovisión orgánica del mundo sino de apoderamiento y dominio. ¿Cómo incide
esta perspectiva en las prácticas scouts?. Veamos
Podríamos
considerar a la Ley Scout como un Universal que podría alojar a lo particular
de cada lugar… después de todo en el “pensamiento
mestizo”[2]
no se trata de remitirse a un idealismo sobre las poblaciones originarias de
hace 500 años, sino reconocer que existen una inmixión cultural variable
como realidad que vive la gran mayoría de los países de América Latina
especialmente en las ciudades, produciendo otra cosa al discurso Europeo o
Norteamericano (donde la inmixion fue inexistente). El pensamiento mestizo se
constituye como Uno y Múltiple… Uno como factor de unidad del movimiento
scout, múltiple en tanto aloja las lecturas particulares porque no
existen los niños y jóvenes “en general” sino los que viven realidades sociales
y culturales diversas aún dentro de una misma ciudad.
Aquí
nos encontramos con el problema de que en el Escultismo Tradicional la
Ley es entendido como Imperativo Categórico: EL SCOUT ES… funciona a la manera de la frase del
libertador San Martín que versa “serás lo que debas ser o no será nada”
dejando al niño y al joven entre el Ser… y la nada. El Escultismo comercial es más voraz…
convierte la Ley Scout en un protocolo de conductas donde directamente
no
existe diferencia entre el Ser y el Ideal conformando el primer
proyecto educativo Biopolítico que ha llegado tan lejos como querer fabricar
el scout a costa del niño… si alguien lo toma en serio es aplastante y
enloquecedor. ¿Cómo entender la adhesión a la Ley Scout desde nuestrAmerika? No
somos scouts simplemente por haber formulado una promesa que produce una fijeza
en el ser engendrando una categoría social … más bien estamos
siendo scout lo que implica algo muy distinto.
La educación popular en
el escultismo y su relación con el estar
siendo
El
estar
siendo es una dimensión de la experiencia comunitaria. El
escultismo es algo que vivimos en la patrulla con otros y en cada juego,
aventura, acción comunitaria estamos siendo scouts con otros. Esta
verdad de Perogrullo se hace evidente cada vez que un muchacho o los dirigentes
se dirigen al grupo; ellos no son una masa Identificada con un líder que se
anula en la patrulla / grupo (vieja concepción europea de la psicología de las masas)
sino que son parte de una Unidad donde lo múltiple de cada singularidad
constituye el borde de lo común que posibilita los lazos de amistad, la construcción
de proyectos en común impidiendo la uniformidad.
En
el estar siendo la naturaleza, el
conocimiento y los hombres conforman una trenza orgánica donde la
técnica es una reiteración del saber hacer que
durante generaciones produjeron los hombres en relación con el paisaje,
por eso a los conocimientos comunes de los scouts que hacen lazo con niños y
jóvenes de todo el mundo, el desarrollo woodcraft del lugar donde vivimos nos
permite trenzarnos en el paisaje haciendo necesaria la transmisión
cultural que a diferencia de la enseñanza escolar va acompañada de narraciones,
historias, mitos, música y leyendas que no son más ni menos que las
formas que encontraron los que nos precedieron para construir mediante el
lenguaje explicaciones y modalidades de estar con el paisaje. Si tomamos como
ejemplo la música podremos observar que sus construcciones obedecen a la
relación del hombre y su tierra… ejemplo de ello son los aires de la zamba que
asemejan las subidas y bajadas de los cerros, la milonga surera que revela la
relación del gaucho y el peón rural en una pampa donde el horizonte no encuentra
límite, la música andina expresando en la quena el sonido que quiebra la
soledad de un desierto asfixiante y el carnavalito señalando el tiempo de fiesta
y encuentro; no podemos olvidarnos del tango porteño y la vida del conventillo atravesada
por los afectos y sueños pasados,
presentes y perdidos... El conocimiento desde esta perspectiva
del escultismo no es sin ese trenzado que nos hace ser parte de la tierra que vivimos,
permitiéndola respetarla y ser sus custodios… después de todo ¿qué
es la Patria sino la tierra donde vivimos?
Me
he cansado de ver grupos scouts cuya relación con la comunidad funciona con la
lógica de una sucursal de una multinacional que opera de forma utilitaria y
extractiva en el lugar donde realiza sus actividades donde la participación de
la comunidad se reduce a proveer al grupo scout de lugar, comprarle empanadas y
rifas. Si se realiza alguna acción comunitaria es en servicio de la progresión
y esto debe ser algo rapidito… los padres y otros miembros de la comunidad
general tienen nula participación porque no se considera que tengan algo para
transmitir que sea valioso para las nuevas generaciones, y esto nos habla
evidentemente de un Ser Scout y no de un Estar Siendo Scout junto con otros
¿son los niños y jóvenes los que construyen las fronteras o son los adultos
temerosos de su relación con los otros? Esa especie de “sentimiento de inferioridad” que padecen niños y jóvenes que por
los distintas migraciones se encuentran en nuestras ciudades con una lógica de
pensamiento distinta a la del neoliberalismo, terminan en autosegregación s
porque no alcanza con hacer lugar a la diferencia sino que a su vez debe
adquirir valor y visibilidad para los otros, que muchas veces repiten el
prejuicio social familiar o el promovido por los monopolios de comunicación… Y cuando
en una actividad del grupo la madre de la niña mapuche enseña a hilar la lana
con una piedra para teñirla luego con sustancias naturales donde el asombro de
los niños y jóvenes nos da chance para una inclusión verdadera, lo mismo con el
papá albañil o mecánico… y es cuando una actividad de Clan se convierte en
apoyo escolar, en una biblioteca viajera que circula por las escuelas de los
niños más humildes, o en el trabajo codo a codo con los padres que construyen
un pequeño salón maternal para que algunas mamás puedan salir a trabajar
mientras otras cuidan de los niños… es allí donde el estar siendo Scouts
nos muestra como no se trata de una
identidad fija, sino del juego de identificaciones orientadas
por la ciudadanía activa, que permite asumir el papel que se necesita en un
momento y contexto concreto.
[1]
Rene Descartes. Discurso del método.
[2]
Siguiendo la línea de Rodolfo Kusch podríamos definir al “pensamiento mestizo”
como las distintas articulaciones del pensamiento seminal que se asienta
en el estar como condición del pensamiento con el pensamiento causal europeo
moderno que se asienta sobre el Ser Racional (no afectado) quien
disecciona y se apodera del mundo.