Las burocracias y los contadores de
estrellas… el movimiento scout también los tiene, en algunos casos son
voluntarios aunque mayormente son rentados porque para hacer esa tarea hay que
tener tiempo más allá que muchas veces la producción de números es determinante
para la continuidad del empleo, lo que lleva a una serie de acciones
colaterales en las que terminan poniendo el cuerpo los voluntarios llenos de
cursos y papeles.
Los
contadores de estrellas suelen tener la habilidad de saber hacer con los
números y buscarles una justificación en una especie de axioma que proponen
como justificación; desde una perspectiva marxiana (no estricta) primero está
la infraestructura económica y luego la superestructura ideológica que
justifica lo anterior. Un ejemplo de
ello es que cuando la cantidad de miembros varones había disminuido
sensiblemente sobre finales de la década del 80 había que subir los “números”
(infraestructura económica) para que den las cuentas, allí se produjo el
enfrentamiento con la WAAGS porque los contadores de estrellas propusieron las
ramas co-educativas (superestuctura ideológica)... más scouts, mas
afiliaciones, más dinero para las organizaciones, más numero. El paradigma dejó
de ser cómo se agrupan los chicos naturalmente siendo el aula de la escuela, y
no el patio del recreo… parafraseando a Groucho Marx, si los conceptos en lo
que baso mi práctica educativa no son tan rentables, aquí tengo otros.
Los
contadores de estrellas, como buenos especialistas en los números y sus
vericuetos, saben-hacer con ellos y utilizarlos como índices para justificar
sus apreciaciones y su propio trabajo con hipótesis con pretensión de ciencia
en la que adjudican a su trabajo u organización logros que dudosamente son
propios, pero claro, como se trata de nombres que son tratados como números y
no de testimonios de las personas respecto de su experiencia en las
organizaciones la cosa se hace sencilla. ¿Te gusta el Rock? Lennon y Mc Cartney
fueron scouts ¿Te gusta la política? Allende y George W Bush fueron scouts. ¿Sos
monárquico? La reina de Inglaterra y el rey de Suecia fueron scouts y así
sucesivamente… scouts para todos los gustos pero nada se sabe del testimonio de
todos los “famosos” scouts sobre el escultismo, donde “la opinión pública”
muchas veces no es lo mismo que la privada. En estos nombres cuidadosamente se
quitan los de aquellos que fueron scouts y víctimas de la dictadura militar,
también cuidadosamente se quitan los de los que fueron scouts y hoy en los
ejércitos del mundo asesinan niños y jóvenes incluso desde drones… no se dice
“fue un Eagle scout”.
Los
contadores de estrellas saben mentir con los números, y si alguno que no fue
scout y es famoso conviene para “el
negocio” ¡lo hacemos scout entregándole el pañuelo y circulamos su foto por el
mundo!.
Los
contadores de estrellas crean la ilusión de que el scout es mejor que otros
humanos y que gracias a su trabajo contable todo es mejor. Son especialistas en
negar que el escultismo participa de la condición humana y que quienes fueron
scouts tienen sus luces y sus sombras, por eso no entienden de que la cuestión
no son los números de afiliados sino los fines del escultismo. Ellos para tener
más número a veces tuercen principios y los fines.
Sería
bueno que los contadores de estrellas dejen de alardear con que el movimiento
scout es el que más jóvenes tiene en el mundo, esto puede afirmarlo solo quien
se pone a contar. No creo que el movimiento scout supere:
·
A
la cantidad de niños y jóvenes que crecen en los valores que se transmiten en
el deporte
·
A
la cantidad de niños y jóvenes que crecen y son parte de los valores en las distintas religiones
Los
contadores de estrellas deberían tener en claro que las verdades son variables,
y que quienes vive encerrado en su planeta contando estrellas no pueden ver
otra realidad que esa, no pueden interactuar con otros discursos, no pueden
tener autocrítica.
A
veces, cuando me cruzo con un contador de estrellas, hago como el Principito, sigo
viaje.
3 comentarios:
Es extraño que contando estrellas no tengan todas las luces para analizar lo horrible de este scoutismo siglo 21, Por suerte ha aún asociaciones que fueron contaminadas
Hay que apostar a pensar atendiendo a los indicios de nuestro tiempo. Saludos!
...Una triste realidad!!
Es evidente que muchas estrellas* están bastante apagadas, dado que permiten ser parte del balance del contador de estrellas.
Un abrazo, Pablo Romero
*Me refiero a las estrellas grandulonas no a las chiquitas
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